¿Cómo mejorar una mala escritura?

Bien, ésta podría ser la pregunta del millón… Sin embargo, la respuesta es fácil:  a través de la grafoterapia o reeducación de la escritura.

Hoy en día,  que  además con el uso de la tecnología y los teclados hacemos un menor uso del lápiz y papel, cuántas veces no nos habremos dado de bruces por entender qué nos ha recetado el médico en la receta; o bien,  qué productos habíamos anotado en la lista de la compra o cuál es ese número de teléfono que tomamos rápidamente;  o cómo es posible que mi hijo, sobrino o alumno pueda estudiar con unos apuntes tan desordenados e ilegibles.

Cuando la escritura presenta numerosos errores en su formación y/o trazado haciendo las letras deformes, imperfectas y la escritura parcial o totalmente ilegible, sin que haya un problema de inteligencia o déficit neurológico del escribiente, estamos ante una clara disgrafía,  que es un trastorno de la escritura principalmente debido a que el individuo no ha alcanzado una madurez motriz. 

Apuntes tomados en clase de un adolescente de 16 años.

Apuntes tomados en clase de un adolescente de 16 años.

Más apuntes y esquemas

Esquema realizado por el mismo adolescente que, además, es zurdo.

En ambos escritos observamos una clara disgrafía. Hay desorden y falta de armonía en todo su escrito: mala distribución del texto dentro de la página, letras deformadas, aumento brusco de algunas letras, inapropiada separación entre palabras y entre líneas, etcétera.

Gracias a la grafoterapia o reeducación de la escritura podremos mejorar la escritura de forma claramente visible.

Y, ¿ cómo?:

  • se realiza un estudio previo de la escritura manuscrita de la persona para poder observar y analizar aquellos aspectos necesarios de mejora.
  • posteriormente se llevará a cabo la terapia: en sesiones individualizadas,  presenciales  y semanales de unos 55 minutos de duración.
  • es totalmente personalizada, atendiendo a las necesidades reales y específicas del escribiente.
  • se proponen una serie de ejercicios específicos para que la persona los realice en casa diariamente (aproximadamente le llevará 10 minutos/día su realización).
  • cada semana se irán proponiendo nuevos ejercicios y tareas para proseguir el avance.
  • mensualmente se evalúan los cambios y progresos obtenidos.
  • la duración de la terapia es variable atendiendo a la evolución del escribiente, si bien el momento de terminar la terapia  se hará de forma paulatina, espaciando las sesiones a cada 15 días para que la persona siga progresando sin provocar una ruptura brusca.

Los beneficios obtenidos por la grafoterapia son visibles y demostrables tal como se observa en la siguiente imagen:

Escrito realizado por el adolescente de 16 años tras 11 semanas de terapia.

Escrito realizado por el adolescente de 16 años tras 11 semanas de terapia.

Para más información y consultas:  

María Nogales                                                                                               Psicografóloga y reeducadora de la escritura                               www.grafologiaygrafoterapia.com

e-mail: grafologiaygrafoterapia@yahoo.es

6 pensamientos en “¿Cómo mejorar una mala escritura?

  1. Muy educativo y claro lo que hablas. También soy grafoterapeuta y he tenido maravillosas experiencias, además agregando un cambio en la firma. Estoy modernizando mi sitio e informándome siempre sobre lo que vaya aportando a esta técnica que amo tanto y me ha dado enormes satisfacciones.Te envío un abrazo cariñoso desde Santiago de Chile.

    • Muchas gracias, me alegro que guste. Sí, la grafoterapia es apasionante y cuando ves los cambios que se producen en la escritura, sobre todo en niños y adolescentes, y compruebas también como mejora su autoestima, es realmente muy gratificante.

  2. QUISIERA SABER COMO AYUDAR A MI HIJO A MEJORAR LA ESCRITURA. PERO EL SE NIEGA DICE NO NECESITARLO, NO RECONOCE QUE NECESITA ORDEN, DISTRIBUCION, ALINEACION Y MEJORAR LAS LETRAS

    • En general, es difícil ayudar a una persona cuando ésta niega que sea necesario. En el caso concreto de su hijo, aunque no especifica su edad, hasta que él no sea consciente que ello le puede ayudar, de poco servirá hacer grafoterapia ya que además de la sesión semanal en consulta implica una continuidad con algunos pocos ejercicios a diario en casa, que si no hay motivación o anhelo de mejora probablemente no lo hará y por tanto no habrá progreso y mejora.

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